miércoles, 25 de mayo de 2016

Deadpool

Marvel parodia a Marvel, así podría resumirse esta divertidísima película de Tim Miller, y es que cada aspecto, cada detalle, es un reirse de sí mismos y sin embargo no deja de ser una peli de superhéroes (o lo que sea Deadpool).

Deadpool  (Ryan Reynold)

La cinta cuenta la historia de un hombre, exmilitar, ahora mercenario, que encuentra a la chica perfecta pero una dura enfermedad  le llevará a someterse a un tratamiento brutalmente agresivo con el que además de curarse, le prometen que adquirirá habilidades especiales, Wade Wilson (Ryan Reynold) acepta, lo que no sabe es que su caso no deja de ser un experimento más del maquiavélico Ajax (Ed Skrein) o Francis como lo llama Deadpool/Wade Wilson, que no termina de salir como esperaba, la desfiguración de Wade es total.

Lejos de deprimirse Wade adopta una actitud positiva, muy positiva y se enfunda en un traje rojo y una máscara para, bajo el nombre de Deadpool, vengarse del que lo dejó así tomando al humor como su mejor aliado. De esta forma la película se convierte más en una comedia que en una peli de acción, aunque la acción no es que falte ni mucho menos.



Ryan Reynold borda el papel de superhéroe políticamente incorrecto, su personaje es más un antihéroe que otra cosa, es un luchador feroz contra la injusticia y contra los villanos, mostrándose feliz y gozoso cuando acude a enfrentarlos y darles acero, bien con sus catanas bien con sus pistolas, metralletas, granadas,... o con su mala boca, irrefrenablemente mal hablado.

Tim Miller debuta en dirección de forma brillante con una película bestial, con humor a tope, violento y soez y sin embargo nada incómodo, que no decepciona ni a los amantes del género superhéroe, tipo X-Men (a los que también parodia), ni a los que buscan entretenerse y ver una buena peli con las que echar unas risas. La diversión está garantizada.




martes, 17 de mayo de 2016

La Quinta Ola

Se trata de una película caatstrofista (y catastrófica) en la que unos alienígenas, que nadie ve, ponen sus ojos en la Tierra, quieren hacerse con ella y para ello deben exterminar a la raza humana, he ahí lo de las olas con las que progresivamente van sacudiendo el planeta hasta devastarlo por completo. Muchos efectos especiales, bien cuidados, mucho amor adolescente, mal cuidado y una dirección caótica, más incluso que el propio caos que representa la situación límite que viven los propios personajes de la cinta.

Cassie Sullivan (Chloë Grace Moretz) en un campo de refugiados

Breve destripe
Chloë Grace Moretz es Cassie Sullivan, una chica de instituto, animadora enamorada de un atractivo jugador del equipo; Cassie es reservada pero valiente y se verá sumergida de golpe y porrazo en lo que parece el fin del mundo (para ella y para todos). Se producen terremotos, contaminación del agua, caidas electricas y un virus que hace enfermar en masa a la población mundial, todos estos son olas, hasta que se produce la quinta. Quedan supervivientes a tanta catástrofe y es hora de exterminarlos, aquí entra en juego la quinta ola.

Cassie pierde a sus padres mientras que su hermano es llevado a una base militar de donde deberá rescatarlo, por el camino Cassie tendrá que lidiar con la supervivencia en su más básica esencia, con el amor inesperado, con los disparos de francotiradores apostados en el bosque y sobre todo con una verdad difícil: la quinta ola.

Chloë Grace Moretz realiza un trabajo aceptable, su interpretación resulta convincente aunque bien es cierto que le queda mucho por evolucionar. El resto del plantel cumple sin más, no obstante estamos hablando de una película en la que prima por encima de todo el entretenimiento más que el aspecto interpretativo. Buena para echar la tarde, y parece que dejan la puerta entreabierta a una segunda parte, ya veremos.




jueves, 12 de mayo de 2016

Requisitos para ser una persona normal


Película debut de Leticia Dolera como directora. Se trata de una película fresca, joven, con voluntad de ser una comedia sin llegar a serlo y con tintes románticos, aunque menos de los que eran de esperar.

Requisitos para ser una persona normal es sobre todo una crítica, bastante ilustrativa, de lo que por lo general se entiende que debe consistir la vida; aborda unas cuestiones que toda la gente "normal" procura atender y en la mayoría de los casos cumple, viéndose como anormal el hecho de no hacerlo, estas cuestiones o requisitos son: tener un trabajo, una casa, una pareja, aficiones, vida social, vida familiar y como séptimo punto ser feliz.

Borja  (Manuel Burque) y María de las Montañas  (Leticia Dolera)

Leticia Dolera, que además encarna el papel protagonista como María de las Montañas, no cumple ninguno y su propósito es conseguirlos todos para lograr ser una persona normal. Sin trabajo y echada de su piso por adeudar varias mensualidades de alquiler, se ve con la necesidad y casi la obligación de volver a la casa familiar, junto a su madre y su hermano. Pronto conocerá a Borja (Manuel Burque), un empleado de Ikea que se convertirá en su mentor para alcanzar los requisitos lo antes posible, a cambio ella deberá ayudarlo a él en su propósito personal, adelgazar.

Ni Dolera ni Burque destacan especialmente, sus interpretaciones parecen forzadas, bastante artificiales, sin chispa, como si las emociones que se les presupusiesen no tuviesen cabida, ya no. Por otra parte la direccion resulta novedosa, con planos de los actores hablando a cámara, aunque no llega a producirse la química necesaria con el espectador. Leticia deberá seguir aprendiendo y mejorando.


jueves, 5 de mayo de 2016

Joy

Estrenada en España en enero de este mismo año, "Joy" cuenta la historia real de una norteamericana, Joy Mangano, que allá por los años noventa inventó la fregona milagrosa (miracle mop) con la que iniciaría una serie de inventos que le ha llevado a ser una importante empresaria.

Joy  (Jennifer Lawrence)

Joy, a quien da vida Jennifer Lawrence, se encuentra en una situación altamente precaria, con una familia desestructurada y notablemente desquebrajada; sus padres separados desde que ella era una niña, su abuela le ha mimado siempre y la ha convencido de que tiene algo así como un don para crear cosas y hacer feliz a la gente, lo cierto es que la verdadera carente de felicidad es la propia Joy.

Separada de su marido, Joy lo acoge en el sótano de la casa familiar, mientras su padre va y viene de relación en relación, retornando a la casa como si nada, su madre, por su parte, vive aislada de la realidad e inmersa en culebrones de televisión, todo es caótico, sólo parecen aportar sensatez los propios hijos de Joy.

Trudy  (Isabella Rossellini) recriminando a  Joy  (Jennifer Lawrence)

La película es una oda a la desesperanza y sobre todo un homenaje mayúsculo a la paranoia. Se hace difícil enteder como una chica de 33 años puede sostener su propio equilibrio mental viendo como el resto de su familia hace tiempo que lo desparramó por el suelo. La entereza que muestra Joy cuando todos los esfuerzos que hace por ayudar a su familia se ven "recompensados" con críticas destructivas y desprecios, incluso humillaciones sin ningún tipo de remordimiento por parte de su propia familia, fundamentalmente de su padre Rudy (Robert de Niro) y la última novia de éste, Trudy (Isabella Rossellini), es digno de alabar, con el aplomo de no darles ni tan siquiera una mala contestación, en este sentido, esta película muestra cuan duro fue el calvario por el que pasó Joy hasta conseguir que sus sueños y sus ideas se hicieran realidad. No desesperó, flaqueó pero no se rindió.

En un despliegue magnífico de comprensión y tolerancia Joy acoge en su seno a toda su familia, incluida su hermanastra Peggy (Elisabeth Röhm), con la que tanto choca. Joy aporta una oportunidad de negocio muy viable y muy prometedora mientras ellos esperan con "el látigo" para someterla y reprender cada paso fallido que le juega la vida. Jennifer Lawrence está sencillamente espléndida, su interpretación es de oscar, no obstante fue candidata a éste como mejor actriz protagonista, su interpretación de una mujer de la década de los noventas, cuando apenas éstas empezaban a asomar la cabeza, con ideas de futuro, con proyectos, ilusiones y una fuerza interior admirable es sublime.


La cinta dirigida por David O. Russell puede llegar a desesperar al espectador, admito que genera sentimientos contradictorios, de un lado quieres que todos salgan del letargo absurdo y paranoico en el que se encuentran y por otro esperas que la inventora pueda triunfar y dejar atrás a esa familia suya que le supone un claro lastre pero, Joy es demasiado buena, jamás los abandonará aunque sea eso lo que ellos se merezcan visto el desarraigo que en todo momento le profesan a la luchadora e incansable Joy.

Gran trabajo de Jennifer Lawrence y no tan bueno de David O. Russell. La película merece la pena por el sólo hecho de ver la lucha infatigable de una mujer, de una persona, por salir adelante, pese a los mil obstáculos que le plantea la vida.