Desde Inglaterra para el mundo, "La chica danesa" es un regalo visual, cinematográfico, una de esas películas que sobrepasa el límite de gran película para convertirse en obra maestra.
El director Tom Hooper nos trae este drama basado en hechos reales, coprotagonizado por un sublime Eddie Redmayne y una no menos genial Alicia Vikander, ambos dan vida a un matrimonio danés de principios de los años 20, una pareja de artistas, pintores de reconocido prestigio de vida bohemia pero elitista.
Einar Wegener (Eddie Redmayne) |
Einar Wegener (Eddie Redmayne) es un admirado pintor de cuadros cuya temática central son los paisajes y más concretamente uno que le conecta directamente con su infancia, en el que aparecen unos árboles pobres de ramas, altos, bien erguidos, que bordean elegantemente una ciénaga de aspecto amable pero triste; su mujer, Gerda Wegener (Alicia Vikander) por el contrario, es retratista y se muestra cansada de ver como su marido pinta una y otra vez practicamente el mismo cuadro, a ella le está constando algo más hacerse un hueco en el panorama artístico de la época pese a la belleza de sus obras.
Una mañana Gerda le pide ayuda a su marido para terminar un cuadro, se trata de un retrato de su amiga Ulla Paulson (Amber Heard), la cual no puede asistir para la finalización pero, al cuadro apenas le queda culminar una de las piernas de la muchacha; lo que tendrá que hacer Einar es posar como si fuese Ulla con la única necesidad de adoptar la postura original usando unas medias y unas zapatillas de ballet. Gerda no es consciente de lo que su petición está a punto de provocar. La textura de la media, la pose femenina, el sentirse contemplado le produce sensaciones placenteras despertando en Einar unos sentimientos olvidados pero muy intensos.
Gerda Wegener (Alicia Vikander) junto a Lili Elba (Eddie Redmayne) |
Lo anecdótico de sustituir como modelo a Ulla va más allá, tanto a Einar como a Gerda les parece gracioso el rol femenino adoptado por el pintor y deciden llevarlo a un nuevo nivel: Einar se vestirá de mujer y se maquillará como tal para acudir a una fiesta, la idea es que pase desapercibido, que todos crean que es una mujer, para ello Gerda enseñará a su marido a caminar con tacones y a moverse y actuar de forma femenina. Einar, bajo el nombre de Lili Elba y el parentesco de prima del propio Einar, acompañará a Gerda a la fiesta.
Entre todos los asistentes al acto, parece que solo Ulla se ha dado cuenta de la situación y decide seguirles el juego. Einar se siente intimidado pero contradictoriamente disfruta del momento, todos lo miran pero no lo ven a él, ven a Lili y eso le gusta. Lili es hermosa y elegante y no tarda en ganarse el interés de los hombres.
Gerda sentada en el suelo junto a su amiga Ulla Paulson (Amber Heard) |
Días después Einar seguirá sintiendo la necesidad de ser Lili, de vestirse de mujer, de maquillarse, de gustar; el juego ya no es tal. Gerda no entiende porqué su marido sigue con el papel de Lili, desea que pare pero él no puede. Einar ha descubierto su verdadero "yo", se siente cómodo siendo Lili, no se trata de un juego, ni de una interpretación sino de una liberación, Lili es libre, es feliz, mientras que Einar es un engaño para sí, una tortura. Einar sufre, no entiende nada solo sabe que a Lili la lleva dentro y necesita que salga, que sea, que exista.
Todos los médicos a los que acuden terminan ofreciendo el mismo diagnóstico, Einar padece un trastorno psicológico o aún pero es esquizofrénico, incluso lo someten a radiación pero nada cambia. Agotados de ir a un médico y a otro aceptan la recomendación de Ulla de visitar un especialista en lo que ella define "hombres confusos", se trata del director de un hospital de mujeres que ya ha atendido casos similares. A Einar se le alumbran los ojos cuando este hombre le dice que comprende su situación y que le cree cuando Einar le asegura que en su interior se siente mujer, ofreciéndole la oportunidad de realizarle una operación de cambio de sexo, Einar acepta encantado. Los riesgos son grandes y más en una operación como ésta que nunca antes se ha realizado pero Einar quiere ser libre y abandonar la cárcel que es para él estar encerrado en ese cuerpo masculino, desea ser libre, ser quien su interior dice que es, ser Lili.
Maravillosa película que trata probablemente el primer caso de persona transgenero, en la que brilla de forma absolutamente espectacular Eddie Redmayne, su interpretación de Einar/Lili es bestial, magnífica, impresionante, sublime, incomprensible que no se alzara con el oscar al mejor actor protagonista, que sí se llevó Leonardo DiCaprio por "El renacido". Y que decir de Alicia Vikander, tremenda en su papel de esposa de Gerda, es un deleite para los sentidos verla, oirla, disfrutarla, ella sí consiguió el oscar a mejor actriz de reparto con "La chica danesa". Sin duda alguna, Redmayne y Vikander forman una pareja perfecta, con una complicidad incuestionable, hay química y hacen que la película cobre vida, sea auténtica, muy auténtica.
"La chica danesa" es posiblemente la mejor película del año.