sábado, 17 de junio de 2017

Dope

En 2015 nos llegaba "Dope" de la mano del director Rick Famuyiwa y protagonizada por Shameik Moore, una película juvenil ambientada en un conflictivo barrio de Los Ángeles en el que las bandas campan a sus anchas y dominan la calle.

Diggy  (Kiersey Clemons), Malcon  (Shameik Moore) y Jib  (Tony Revolori)

Malcon (Shameik Moore), Jib (Tony Revolori) y Diggy (Kiersey Clemons) son tres adolescentes autodenominados frikis, apasionados de la época de los noventas, su música y su estilismo, lo que los convierte en un blanco fácil de las burlas del instituto al que acuden a diario y de su vencindario en general. Una noche en una fiesta clandestina, con motivo del cumpleaños de Dom (Asap Rocky) un importante camello local, la policía irrumpe de forma inesperada en el garito interrumpiendo una venta de droga, Dom consigue no perder los paquetes pero no puede salir de allí con ellos por lo que los coge y los mete en la mochila de Malcon, quien junto a sus amigos lograron colarse en la fiesta. Malcon, ajeno a todo esto abandona el local ante el gran alboroto, ignorante de lo que porta en su mochila.

Un nuevo día en el instituto, Malcon y su inseparable mochila cruzan el arco de seguridad de la escuela, esta vez el perro del vigilante ladra vigoroso a su paso, Malcon no entiende porqué y el vigilante tampoco por lo que decide dejar pasar al muchacho. Una vez dentro, Malcon descubre que en su mochila lleva algo más que los libros de texto, sus amigos, tan sorprendidos y asustados como él no dan crédito, lo cierto es que en ese mismo instante todo cambia, para los tres. La idea es deshacerse de la droga pero no será fácil, muchos están interesados en ella pero no todos llevan "buenas intenciones". Poco a poco y casi sin querer logran que esta situación que los tiene paranóicos se convierta en toda una oportunidad, y no sólo de hacer dinero.

Dom (Asap Rocky) y su "guardaespaldas"

Interesante película que parte de una situación dramática para llevarnos en un viaje de comedia descafeinada a un descenlace ciertamente reconfortante pese a lo poco o nada legal de su resultado. A destacar el buen trabajo firmado por Shameik Moore, un talento incipiente que hay que seguir.




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